martes, 10 de enero de 2012

Carmen


A través del blog de Francisco Naranjo me llega la noticia de la muerte de Carmen, mujer luchadora, dulce y buena, esposa de mi amigo Simón Sánchez Montero. Prefiero poner esta foto antigua de ellos en la que están tan guapos. Es una hermosa imagen.

Cuando iba a ver a Simón, la recuerdo, amable y tierna, ofreciéndome un café, charlando en su pisito de Aluche. Se interesaba por todo. Me preguntaba por mi hijo Ismael y me ponía como fondo sus canciones. Carmen no era sólo la mujer de Simón. Carmen era una mujer de fuertes convicciones, luchadora, irreductible que, como tantas otras, trabajaron hombro con hombro con sus compañeros o solas, por la libertad y contra el franquismo. Me la encontraba en las fiestas del PCE, ayudando en cualquiera de los quioscos, siempre con Simón al lado.

Es de esas mujeres que lo dieron todo por los demás, como Simón. Convencidos de que la clase obrera era la única clase a la que se podía estar orgulloso pertenecer. Creo que Naranjo ha hecho un retrato completo de ella. Así que os paso el enlace Carmen

Aida, un abrazo muy fuerte.

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6 comentarios:

SONIA FIDES dijo...

Descanse en paz. No la conocí como tú, pero es de esos seres humanos que a través de ojos como lo tuyos se convierten en imprescindibles, en enseñantes. Quién no desea ser valiente y libre y coherente y honesto.

Gracias, Rodolfo.

Un beso súper.

jaime dijo...

Gracias por presentarme a esa hermosa mujer, Rodolfo.

Brindo por ella.

Andina dijo...

Que lindo conocer personas como ella, y que pena perderlas!!

LOS CARRILES DE LA VIDA dijo...

Precioso y necesario comentario sobre una mujer valiente de las que han dado ejemplo de lucha por la libertad en España. Gracias Rodolfo !!

Anónimo dijo...

Por la memoria de los que frágiles abandonan solo las pilchas y dejan el hueco lleno en el corazón del otro.Abrazo

Sete dijo...

Lo siento, lamento la pérdida y el dolor que todos estaréis sintiendo. Aunque en estos momentos no sirve de nada, es muy bonito tu despedida envuelta en palabras admirables en este cuelgue. Un abrazo y mucho ánimo.