martes, 18 de diciembre de 2007

Simón Sánchez Montero

Ayer estuve en el Congreso de los Diputados. Concedían a título póstumo la Gran Cruz de Mérito Civil a Simón Sánchez Montero. Lo recogió, emocionada su mujer, Carmen. Gran mujer y tan luchadora como él por la libertad y la democracia. No sé si el nombre de Simón dice algo ahora. Fue un gran luchador, un hombre que pasó largos años en la cárcel, militante del PCE torturado en prisión, y, ya en democracia, diputado comunista. Tuve la enorme suerte de ser amigo suyo y compartir cafés y charlas. No encontraréis referencias del acto en los periódicos. Yo no las he encontrado, salvo una en El mundo.

Esta sociedad olvida con demasiada facilidad. El ejemplo de Simón no debe quedar en el olvido y, tal vez, actos como el de ayer sirvan un poquito para compensar tanta amnesia. Fui alguna vez a su casa a charlar con él y con Carmen. Me ponía, siempre, la canción de Ismael, aquella de Al Bando vencido. Y ayer pensaba yo cuanta verdad hay ene sos versos que dicen: "se van llevando la memoria / y queda en la historia / una mancha un borrón".

Simón fue, por encima de todo, un hombre bueno. Un santo laico. Una persona que se hacía querer y que trató a todo el mundo con generosidad y cariño. nunca guardó rencor a nadie, ni siquiera a sus torturadores. Ayer, alguien contaba en el transcurso del acto que cuando el jefe de la Brigada Político-Social, Saturnino Yagüe le estaba torturando le preguntaba: "Pero ¿porque dejas que te torture?" Y Simón contestaba: "Para que un día consigamos una España en la que nadie te haga a ti, lo que tú me estas haciendo a mí".

Lo más terrible de todo es que allí estaba Rodolfo Martín Villa, miembro de un Gobierno que mantuvo a Yagüe. Siendo miembro del Gobierno y responsable de Interior, acompañando a la Policía para reprimir las manifestaciones y protestas pidiendo libertad, iban los Guerrilleros de Cristo Rey y miembros de la Triple A. Siendo él ministro, murieron a manos de incontrolados, estudiantes como Arturo Ruiz y se produjeron los asesinatos de los abogados de Atocha.

Pero ayer estaba allí Martín Villa que recibió palabras de elogio de algunos de los oradores. No voy a decir nombre. Carmen explicó que Martín Villa había llamado para ofrecerse a pagar las medallas, ya que el Gobierno concede las distinciones pero no las paga. Sentí una bocanada de asco y de amargura. Y me pareció que era la última tortura a Simón Sánchez Montero. El tristemente recordado Yagüe siguió hasta 1975 como responsable de la Social. Nadie le pidió cuentas jamás por las torturas que él y sus hombres infligieron a tantos demócratas.

Martín Villa, hoy demócrata convencido, se ofrece a pagar las medallas a un hombre al que su régimen persiguió: 700 euros. Un precio muy barato para lavar conciencias.

22 comentarios:

Alicia dijo...

Que no caiga en el olvido. Gracias Rodolfo, por esta y tantas historias. Alicia

yo mismo dijo...

excesivamente barato. no hay nada más que decir, tú lo has dicho todo. no podemos olvidar a esos que soñaron y lucharon por una españa mejor, aquellos que pensaron en los jóvenes de hoy, que apostaron fuerte, pese a todo, por un futuro mejor.

gracias.

Verónica dijo...

Buenos días Rodolfo.

No debemos olvidar, nunca! Siempres son los mismos los que nos dicen que olvidemos, los que no tienen la conciencia tranquila...

Siempre es un placer leerte

Un saludo!

Pablo dijo...

Somos un país que se atreve a juzgar las dicaturas argentinas, chilenas o cubanas, manteniendo nuestro paternalismo hacia latinoamerica pero no nos atrevemos a mirar hacia nosotros mismos.

Anónimo dijo...

Sí, ya sabía lo de las medallas. Es un absurdo.


Por cierto Rodolfo, ¿has leído "Mala gente que camina"? Yo estoy ahora mismo con este libro y creo que te gustará.

montse dijo...

La medalla mas bonita que se le puede ofrecer, es que los buenos amigos le recuerden como tu lo acabas de hacer, como un hombre bueno.

Miguel A. Ortega Lucas dijo...

Y cuántos Simones Sánchez Montero quedarán hoy, vivos, tomando papilla en residencias de tercera; y cuántos otros Simones Sánchez Montero estarán muertos y enterrados hace años, sin que nadie, nunca, vuelva ya a saber quiénes fueron

Qué país, eh. Qué país

En El Corazón del Bosque dijo...

Rodolfo, qué suerte tenemos de que haya alguien como tú para acercarnos éstas historias que desgraciadamente no le importan a nadie.
Un beso

Unknown dijo...

Hola Rodolfo, por primera vez me atrevo a escribirte aunque reconozco que soy fiel lectora de tu blog, que me encanta. Cuánta razón en tus palabras, qué asco y que amargura (como dices) al leer estas cosas. Menudo bicho Martín Villa, como tantos otros tristemente. Y como muchos otros también Simón Sánchez Montero, olvidados y maltratados por la Historia. Mientras estén en nuestro recuerdo, de una forma tan hermosa como la relatada en este post, estarán vivos.

Saludos de una zamorana :)

Lara

Verónica* dijo...

No creo que nadie realmente lave la conciencia así. Supongo que se sentirá mejor consigo mismo, o pensará que el resto del mundo le ve de otra manera... pero hay conciencias que no pueden ser lavadas.

Paseando por tu nube dijo...

Recuerdo a ambos con diferentes y encontrados sentimientos, me viene a la memoria la humanidad y el sosiego que transmitía Simón Sánchez Montero, sólo con mirarle, y cuando hablaba, aumentaba esa sensación al escuchar su tranquilizadora voz. Me gustaba su gran persona. En cuanto a.. casi prefiero no ponerme desagradable, me quedo con el grato recuerdo de Simón Sánchez Montero.
Un beso Rodolfo

Inma. dijo...

Muchas gracias por la crónica Rodolfo. Que un Gobierno socialista conceda una distinción que luego tiene que pagar un personaje como Martín Villa, la verdad que es repugnante. Para eso que no concedan nada.
saludos.

Belinda Flores-Shinshillas dijo...

Rodolfo,

Me parece que lo que veo en la vivencia que nos cuentas es un espíritu de gran adelanto, un espíritu de luz. Cuando los seres espirituales que se encuentran mas allá de los nuestros, deciden descender otra ves a este mundo, lo único que traen consigo es cambio, bienestar, luz. Para los demás es increíble lo que aguantan, lo que soportan y por lo que pasan...pero para ellos que se encuentran llenos de sabiduría y confianza, eso no es mas que su trabajo, lo que pidieron venir a hacer, y así dejarnos una enseñanza que tarde o temprano alguien...el que sea, entenderá.

Afortunado el que conozca y entienda la trayectoria de un espíritu así...afortunado tu Rodolfo por conocer a uno así.

Belinda

Marga dijo...

Somos los hijos y nietos de quienes han vivido estos horrores allá en España y acá en Sudamérica los llamados a mantener viva la memoria, y no dejar que todos aquellos que lucharon por otro mundo queden en el olvido, un abrazo grande con todo el calor de Santiago.

yraya dijo...

Pues viniendo de esa "gente" yo la verdad me quedaría sin medalla, que falsedad.

Anónimo dijo...

Parece que cualquier homenaje será poco. Es triste recordar que otros dieron la vida para que otras personas pudieran vivir en libertad. Yo confío en que la Ley de la Memoria Histórica ayude a poner a cada uno en su lugar.

Azul dijo...

No viene a cuento, pero recuerdo el final de las trece rosas... "no guardes rencor, los hombres buenos no guardan rencor, y tu has de ser un hombre bueno..."

Pero es difícil no guardar rencor a los miserables que se enfundan la chaqueta que más abriga... a los que entonces torturaron seres humanos, y ahora sin el más minimo sentimiento de vergüenza, levantan como estandarte la bandera de la democracia, a la vez que afirman desde sus filas, que no es positivo remover el pasado... lo que yo creo que no es positivo, es pisotear la memoria, y dejar impune tanto delito cometido, tanta atrocidad, tanto torturador convencido y orgulloso... lo que no es positivo, sin duda, es esta sensación de repugnancia que me invade cada vez que veo a ciertos personajes... y ahora recuerdo lo "placidos" que fueron aquellos 40 años según algunos...

En fin, que no te voy a decir lo que hacía yo con los 700 euros, porque no es plan...

Un saludo

síl dijo...

uf, me ha entrado un escalofrío tremendo leyendo este texto... gracias por compartir historias que, de otra manera, muchos no sabríamos... y, como dicen, mientras alguien les recuerde los muertos seguirán entre nosotros...

un gran abrazo, rodolfo

Rodolfo Serrano dijo...

Simón estaría muy orgulloso de vuestros comentarios. Estoy seguro

Marinero en Marte dijo...

Me encantan estos ejercicios de homenaje y de memoria que nos brindas Rodolfo.
La verdad, que como en el caso de Simon, es vergonzoso el poco reconocimiento que tienen personas que se han dejado la vida en que siga habiendo vida....


Gracias Rodolfo.

CARMEN dijo...

Como nieta de fusilado y sobrina de desaparecido, perdonar aunque me cuesta, perdono, pero olvidar, eso nunca.
Gracias por recordarnos a ese hombre bueno que fué Simón Sánchez Montero.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Feliz navidad...
Desde chile un abrazo ..

Como siempre , Salud..