miércoles, 20 de marzo de 2013

Julia


Hace muy pocos día murió Julia. 
Fue para mí una madre y muchas cosas más


Llueve en el campo, Julia, mansamente.
Las encinas son sombras y en los cerros
las nubes se deshacen.
Florecerá muy pronto el campo. Y el arroyo
se llenará otra vez de madreselvas.

La tierra está empapada.
Hay una paz de iglesia
en las calles del pueblo. Sólo escucho
el golpear del agua en los tejados. Tenuemente.
En un prado unas vacas, como viejos filósofos,
miran el día gris que se acaba en un rezo.

Pienso en ti en esta tarde de marzo y de llovizna.
Morir así, dejarse morir en esta tierra,
con el olor a hierba y rodeado
del calor de los otros, del murmullo
casi asustado y torpe
de los viejos que temen encontrarse,
tras la tapia y la esquina, la otra sombra,
debe de ser volver a la vida primera.

Quien sabe qué te espera o si andarás con alguien
en el suave camino que te adentra en la noche.
Pero aquí, en el montículo del viejo cementerio,
hay voces que te nombran como esas poesías
de tu escuela de niña. Y un llanto lento y suave
lo mismo que esta lluvia que ahora nos consuela,
te acompaña y te abraza.

Ya no habrá calendarios que nos traigan tu nombre
pero estará el recuerdo como un beso muy dulce
rozándonos la piel como agua bendita.

23 comentarios:

Anónimo dijo...

Precioso!!

Carlos dijo...

Es dificil decir algo, hilvanar palabras capaces de poner algo de paz en el corazón cuando este tiembla por una persona querida que no se va a ver más.....

Desde luego, amigo, le has hecho el mejor homenaje posible.

Un abrazo desde esta Barcelona, ahora tras leerte, un poco más triste, un poco más gris

jaime dijo...

Un abrazo fuerte y duradero.

CARMEN dijo...

Un beso y un abrazo muy fuerte.

CARMEN dijo...

Un beso y un abrazo muy fuerte.

Unknown dijo...

Todo el amor, el calor, los abrazos y los besos que necesites! Cariños!

Ciudadano Kamikaze dijo...

Aunque me paso con asiduidad por aquí, hacía tiempo que no comentaba. Siento que la ocasión para comentar sea para decir que lo siento, compañero.

Un abrazo, Rodolfo.

Miguel A. Ortega Lucas dijo...

Pero la muerte no interrumpe nada, "todo está siempre comenzando". Y la muerte será crecer más hacia dentro

Un abrazo, amigo

ordenandopalabras dijo...

He quedado muy triste con la noticia. Deseo que Julia esté rodeada de ángeles y de poesía como la tuya.

Mucho ánimo y abrazos hasta los huesos mi amigo.

ana-lili.over-blog.es dijo...

Ser poeta tiene eso,que el recuerdo sea galardonado de bellas palabras y emoción,en este caso,coronado de amor,de sentimientos.(un abrazo,Rodolfo)Lilí

JOAN dijo...

Ante un final no es fácil encontrar las palabras justas y tu lo has hecho. Decir nada más está de sobra...

Un abrazo fuerte y cálido hoy más que nunca

Isabel Motos dijo...

No creo que hubiera mejor despedida y catarsis que estos versos. Mucho ánimo en estos momentos tan duros, Rodolfo.
Un abrazo muy fuerte.

Margari dijo...

Uff, qué bonitos versos! Me has hecho sentir tanto... Lo siento muchísimo!
Besotes y ánimos para estos días!

mejor la vida simple dijo...

Hoy confundo los faros
que marcan el regreso y el naufragio.
Las huellas encendidas,
envejecen.
Voy con un cansancio usado,
leyendo titulares,
palabras sueltas,
páginas pequeñas.
Y de nuevo, ese miedo oxidado
que persiste,
entre el delirio de verte otra vez,
y el absurdo de tenerte,
cuando ya no existes.
En la espuma mal trazada del camino,
quedé varada,
y no avanzo,
sin el aire que respirábamos juntos.
Después del mar,
me fui al exilio, a buscar
la vida que quedaba.
Hoy supe de la lluvia
en otros campos,
de la luz que humedece
y prende, por ausencia.
La tierra deshabitándose,
y aquel lugar donde ella va,
que quisiera bello,
se puebla.

Un beso.

M. Belén dijo...

Un precioso y merecido homenaje. Julia seguirá viva, porque la llevaremos siempre en el corazón.
Belén

M. Belén dijo...

Un precioso y merecido homenaje. Julia seguirá viva, porque la llevaremos siempre en el corazón.
Belén

mig dijo...

Bellisimo Rodolfo, triste, creo que la muerte se nos hace tan triste porque somos cobardes o porque ignoramos, de este lado del mundo esta naciendo el otoño, eso también en cierta medida es la muerte de algo, creo que seria lo ideal ver a la vida y a la muerte como una transformación. Así y todo no dejamos de sufrir y de extrañar cuando alguien se nos va, supongo que es el amor que se transforma ese síntoma de extrañamiento...

Rodolfo Morón López dijo...

Gracias por este pequeño homenaje a una gran mujer y mejor abuela.
Nos ha dejado un hueco difícil de llenar. Pero vivírá en cada uno de nuestros sentimientos y recuerdos para ella, en cada una de las lágrimas que, cada vez que la recordamos, caen por nuestras mejillas.
Gracias abuela por todo el amor que nos has tenido y que desde dónde estás nos sigues teniendo.
Gracias por cada uno de los consejos que nos has dado, por tus besos, por cada día que te preocupabas de que todos estuviéramos bien.
Otra vez más y para toda la eternidad estáis los dos juntos de nuevo. Seguro que ya has regañado al abuelo y este ha aceptado tu riña con su haitual silencio.
Cuanto te echamos de menos.
Te has llevado una parte de nuestro corazón.
Gracias por enseñarnos lo que es una familia y lo que es querer de forma desinteresada.
Te quiero muchísimo abuela. Y te echo muchísimo de menos
Gracias por todo el cariño que me has tenido.
Un beso muy fuerte y te guardo en mi corazón.

Menosquemarx dijo...

Contigo en ese sentimiento. Abrazos.

Traubert dijo...


Un beso de palabras, Rodolfo. Mucho ánimo

LOS CARRILES DE LA VIDA dijo...

Con todo mi afecto Rodolfo siempre puedes contar conmigo en la alegría y en la tristeza como ahora, Un abrazo fuerte compañero !! Paco Naranjo

ramon dijo...

Ramón
Gracias hermano, por ese poema que yo hubiera deseado escribirla y no sé hacerlo,
que hubiera deseado decirla y nunca supe.
Ya se ha ido y todavía esta aquí.
Dicen que nadie se va si la tenemos en nuestros recuerdos,
Que sepas que vives en cada momento, en cada instante, en cada soplo.
Pocos días antes de que tu cuerpo se fuera, me dijiste “seguir celebrando cualquier ocasión que tengáis”, se que pensabas en la unión de todos mis hermanos.
Lo haremos, pero tú deberás estar entre nosotros.
Un beso.

Gabriela Pérez dijo...

Hermoso: sólo te puedo mandar un gran abrazo. Mucha fuerza Rodolfo.