En ti
quiero perderme en esta hora
negra de
la tristeza y del olvido.
Ahora
cuando llueve sobre el campo.
Con el miedo
de todo, te recuerdo.
Me
viene muy despacio la nostalgia:
tu cuerpo
como tierra bendecida,
tu
pubis como pluma de un arcángel,
suave
como el otoño y la llovizna.
Aquel
amor furioso, aquellos labios
abiertos
a la noche, aquellas manos
con
soledad de viejas estaciones,
tus
pechos en mis dedos y en mi boca.
Allí
donde la vida comenzaba,
donde habitaba
siempre la alegría,
cuando
todo era luz, cuando tus ojos
buscaban
las tormentas de los cuerpos.
Relámpagos
azules en tus piernas.
Explosión
de la sangre. Y esa muerte
rozando
el corazón sobre la cama
de
hoteles en la niebla y viejos barcos.
En ti
me pierdo ahora, cuando nada
puede volver
a aquellos días gloriosos,
ahora
que el recuerdo sólo tiene
el olor de las cosas que perdimos.
7 comentarios:
Como transmites maestro...
Un abrazo enorme desde Barcelona!!
Ese aroma de las cosas que perdimos, de lasa que no hicimos, quedan por siempre dentro del cuerpo y dentrod el alma
SändrA
Relámpagos azules en tus piernas.
Explosión de la sangre. Y esa muerte
rozando el corazón sobre la cama ...
Desaparezco entre sus palabras... ahora a las 4 de la mañana...la mejor hora para leerle
a la cama me voy con ellas...tan excitantes...
Gracias siempre♡♡
.hermoso y melancólico
Querido Rodolfo adoro su poesía, muchas gracias por compartirla. Como siempre directo al corazón. Bellísima.
Abrazo enorme desde Santa Fe, Argentina.
Agradecido.
"ahora que el recuerdo sólo tiene el olor de las cosas que perdimos."
Qué manera de matar, Rodolfo, qué manera...
"ahora que el recuerdo sólo tiene
el olor de las cosas que perdimos".
Creo que varios de los que te leemos nos identificamos con vivencias similares,por eso estaremos siempre junto a ti.¡Cuánto evoca un olor,y cuánto duelen esos recuerdos que sabemos irrepetibles! (un abrazo,y ya andes "trotando")
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