lunes, 24 de febrero de 2014

Leyendo a Machado

(Se cumplen 75 años de la muerte de Antonio Machado)

Don Antonio, las cosas no han cambiado.
Sigue la misma sed del hombre malo,
la sombra de Caín va por los campos
de la misma Castilla. Y esta España
continúa dividida como entonces.

Hoy, don Antonio, los mismos colegiales,
el hombre del casino provinciano,
y pronto volverá don Guido jaranero
como un trueno, don Antonio, a los altares.

Tantos años después y todo sigue
en la misma tristeza. Y olmos secos
siguen aún abiertos por el rayo.

Releo en esta noche en que se cumple
el triste aniversario de su muerte
la letra de ese mundo que pervive
por encima del humo y la ceniza.

Y no está todo en paz. Están los hombres
al lado del camino. Y no sabemos
para qué sirve el vaso ni la sed.
La verdad, don Antonio, la del otro,
sigue siendo verdad, mas ya no es nuestra.

Esta noche confieso que aún me queda
una leve esperanza, la del niño
que sueña con caballos de cartón,
aunque el hastío o el hambre, don Antonio,
retumbe en el vacío de la cabeza.

8 comentarios:

Manuel Cuesta dijo...

¡Formidable, amigo! ¡Gracias!

Anónimo dijo...

SändrA
Qué lindo...qué lindo escribe aunque sea triste...

Mi profe decía q escribía c9n el corazón siempre. .. eso es lo que falta en nuestra vida mas corazones llenos de amor ..dignos .verdaderos.... que puedan con r9da esa avaricia de poder ...ay..mejor me callo...que comienzo a enfadarme con el mundo y no me salvo ni yo.

un abrazo !!!! De mas de seis segundos x supuesto.

César Ulla dijo...

Una maravilla repleta de verdades, si Machado levantará la cabeza no vería muchas diferencias entre su época y la nuestra... Y qué triste es decir eso, amigo!

Anónimo dijo...

Precioso....como siempre....real como la vida. Un abrazo.Eva, valencia

Paris Joel dijo...

Oleeeee, si señor, has estado soberbio maestro y es verdad: nada ha cambiado.

Carlos dijo...

Es cierto, nada a cambiado. Todo sigue igual.
Tampoco a cambiado la esperanza que habita en el coraz´ñon de ese niño, en el corazón de Don Antonio, En el corazón de las personas buenas.


Precioso, como siempre

Setefilla Almenara J. dijo...

Un poema magnifico, Rodolfo. Te felicito.
Un saludo.
Setefilla.

mejor la vida simple dijo...

Ruido de caracolas
cuando intento que no olvides,
al menos,
que no me olvides pronto.
Flores gigantes en la línea roja,
porque sueño que vienes
a buscarme a la alcoba,
y cambio el universo
por esa breve imagen
que muere cada noche.
No quiero seguirte,
vasta el encuentro lento
en el ocaso orgánico
que paro
cuando miro tu nombre.
Suena constante
aquel caer del agua
en las falsas fronteras,
quiero cruzarlas todas,
poner polen de un verso
en un cuenco de barro,
derramar la espera.
Siempre que estas,
hay algún nuevo día.
Ruido de caracolas,
en el asfalto crudo,
rostros de amaneceres
en náufragos
que huyen
y rompen sus promesas.

Un abrazo.