jueves, 20 de octubre de 2011

Una historia sencilla

Me cuenta una amiga argentina una historia muy sencilla. Una historia que soy incapaz de contar y que prefiero que la leáis en Del otro lado del árbol.

Lo maravillosos de esta historia es que los sueños de esa niña y de su madre se han cumplido gracias a la sensibilidad de un pueblo y al esfuerzo de Paula y de tanta gente. En este mundo en que se leen historias atroces, esto tan sencillo, conmueve. Hay tantas cosas pequeñas por hacer... Y tan importantes.

7 comentarios:

Antonio dijo...

Triste y preciosa historia a la vez, una lección de amor sin duda que movió los corazones de mucha gente, ojalá que algo se nos mueva a nosotros también, y cada uno a su manera, pinte, escriba, o ayude, en esa cabaña al otro lado del árbol que tenemos frente a nosotros.

yraya dijo...

Produce tristeza que una madre haya perdido a su hija, mucha pena.
Lo bonito ese GRAN PROYECTO con acciones altruista de la gente.
Una entrada muy conmovedora.
Ahhhh, el mes pasado os oí a la familia casi en pleno en la Ventana de Genma Nierga, disfrute mucho.
Un saludo Rodolfo

CARMEN dijo...

Una historia sencilla y conmovedora. Muy triste, pero a la vez te deja un buen sabor de boca.
Un abrazo.

Lylo dijo...

Muy conmovedora historia y un ejemplo de como poder hacer algo bueno y productivo con un dolor tan inmenso y desolador como la pérdida de un hijo.
Hoy, justamente, estuve en el Htal de Niños (soy de La Plata) y vi los carteles que pedían libros para la biblioteca y me llamo mucho la atención cuando encontré esta entrada en su blog. Esperemos que el proyecto de ésta mamá pueda seguir creciendo.
Saludos!!

Sara dijo...

Desgraciadamente, son muchos los niños que mueren por diferentes tipos de cáncer. Soy voluntaria en Aspanoa, hacemos una labor parecida en el hospital de mi ciudad, al igual que en toda España y difentes lugares del mundo. Gracias Rodolfo por este artículo.

LUCIERNAGAS DE CIUDAD dijo...

Me ha emocionando muchisimo esta historia, como un angelito de 5 años es capaz de mover a la comunidad para fomentar la imaginación, la creativida y la ilusión que nos regalan los libros.

Gracias por compartir esta historia Rodolfo.

Petons

jaime dijo...

Gracias.