Oído en
un telediario:
Una
mujer en una manifestación por la educación pública:
“Tenemos que protestar si
no queremos perder nuestros derechos”
Un político:
“No cambiaremos nuestras políticas
por muchas protestas y manifestaciones que
se hagan”
Cuánta
tristeza. Cuánto
dolor en
las palabras que ahora escucho
yo derrotado
frente al televisor.
Por las
calles, se extiende, como un sueño,
la impotencia,
las manos que no tienen
más que
el blanco vacío, el imposible
afán de
la tormenta que no llega,
que ha
de limpiar las plazas y los cuerpos.
Un futuro
sin nombres ni amapolas.
La
soberbia se sube a los caballos,
deshace
claros días, atraviesa
con la
lanza del odio la esperanza.
Mata la
voz del hombre, lo aniquila,
lo entierra
entre palabras. Hay un vómito
agrio
de vino y sangre en el asfalto.
Y todo,
todo está como si nada,
como si
todo fuera una noche interminable,
el
deseo de un fuego ante la cueva,
la
nostalgia de viejos paraísos,
la
sensación del miedo, el lento pulso
de un
corazón cansado y ya vencido.
Más allá
de esas voces se levantan
unos labios
abiertos a la vida,
los
cuadernos y libros escolares,
el alma
de los niños, la tristeza,
el pan
de cada día y las canciones
de amor,
la piel de las estrellas.
Cuánta
tristeza. Amor, cuánta tristeza,
cuánto dolor,
ahora, ya perdidos
para
siempre los mapas que nos traigan
el
tesoro de la isla a nuestras manos.
Mas sálgamos
al mar. Vente conmigo,
La
bandera pirata es ahora nuestra
y Jhon
el Largo nos guía hasta su isla.
7 comentarios:
He salido y seguiré saliendo a la calle, a nuestras calles. En Sevilla, en Madrid, y donde haga falta.
Cuenta pues conmigo.
Salud y República!.
Amigo, es verdad, es difícil y parece que no queda esperanza, que esta se hubiera agotado como el presupuesto de los hospitales. Sin embargo yo creo que de esta pesadilla, tras esta tormenta vendrá el arcoiris, tal vez, todo sea algo mejor. Aún nos queda nuestra voz. Tu voz certera y reconfortante.
Querido Ridolfo siempre la inteligente calma que se pega a los cuerpos y esa vida que antepone el ardiente futuro a lo demás. Desahogo y desdicha y diatriba de amor.
Como siempre un evangelio que no daña como lo hacen otros .
Un beso súper
Maravilloso. Absolutamente maravilloso.
Enhorabuena
Grande, como siempre!! Y hoy con la cara más social :)
Un abrazo y a seguir luchando!
Pues no me da la gana de q me derroten. Me pasé nueve años en el APA del cole de mis hijos. Y ahora, q mi nieta es un bebé, tampoco me voy a callar. Ya vale, ya está bien.
Ahora, menos lamentos y más votar con conocimiento.
Perdona, pero es q me caliento y ni tu poesía (tu bellísima poesía) me enfría.
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